¡Conozca las claves del hombre con el récord mundial de memorización!
Ramón Campayo posee todos los récords existentes de memoria rápida y ha sido el ganador del título mundial de memorización en siete ocasiones. Con su velocidad de lectura comprensiva es capaz de superar las 2.500 palabras por minuto, recordar secuencias de 48 números binarios vistos un segundo y alcanzar su coeficiente intelectual de 194, entre los más altos del mundo.
«Lo que yo hago puede hacerlo cualquiera siempre que entrene lo suficiente», asegura Ramón Campayo, poseedor de todos los récords existentes de memoria rápida y ganador del título mundial de memorización en siete ocasiones, la última de ellas este mismo año en la localidad valenciana de Godella.
Su récord más espectacular consistió en recordar el orden exacto de 500 palabras elegidas al azar entre 23.200 que escuchó durante tres días consecutivos. La prueba era tan dura que le daban la posibilidad de cometer cinco errores, uno por cada 100 palabras, recuerda, pero sólo cometió dos, es decir, logró recordar el orden exacto de 498 palabras entre dos decenas de miles.
También aduce como demostración de la eficacia de sus habilidades casos tan concretos como el de una alumna de 92 años «con problemas de memoria» que, tras terminar un curso avanzado de entrenamiento cerebral, «estaba tan estimulada intelectualmente que se matriculó en Derecho».
El entrenamiento personal de Campayo incluye lectura muy rápida y afinación del procesamiento cerebral utilizando otros métodos. Con ellos, puede memorizar a una velocidad tan elevada que recientemente en Múnich (Alemania) le practicaron varias encefalografías para medirla pero la máquina no pudo registrar bien sus procesos cerebrales «por ser demasiado rápidos».
En España, su capacidad fue analizada por Manuel M. Loeches, coordinador del área de Neurociencia Cognitiva del Centro Mixto Universidad Complutense de Madrid-Instituto de Salud Carlos III de Evolución y Comportamiento Humanos, quien certificó la velocidad de sus neuronas como «la más alta conocida», al registrar una percepción de estímulos visuales 30 milisegundos superior a lo normal y una capacidad de respuesta 170 milisegundos superior.
Los obstáculos y las suspicacias que Campayo afirma haber encontrado en su carrera no le impiden defender una habilidad con resultados tan llamativos como «poder reducir años de estudio aprendiendo los 2.000 artículos del Código Civil necesarios para el empleo de notario a unas pocas horas de entrenamiento».
Campayo, quien cree que «la clave para dominar cualquier lengua reside en eliminar la sensación de dificultad» y «llamar la atención del subconsciente» asociando imágenes con palabras y desarrollando un conjunto de habilidades que sólo un selecto grupo de personas en el mundo ha sido capaz de lograr.
¿Te gustaría desarrollar habilidades tan extraordinarias como éstas?
Dejar un comentario